viernes, 25 de mayo de 2012

Golden. Sumo y sigo.

Hemos sido continuados por nuestro futuro,
honrados en el presente, dando vehículo a la hermandad de la tierra.
El fuego sobradamente prendido, quemó el momento de hoy,
el desborde emocional que me provocó ver tus ojos brillantes,
impactando en el brillo generacional de los que te rodeamos,
celestes, enormes, hermosos, familiares y del cielo,
como dándole el cierre a la templanza de un fulgurante acero.


De una herramienta que transforma más lugares,
en la forja,
pum, pum, pum,
en el tren,
pum, pum, pum,
en el camino,
porque viaja, como pueden sólo los hombres del Invisible.
Como estiman sólo los auténticos. Los heroicos, hermanando.


Y vos sencillo. Viejo. 
Con tus hijos biológicos, sencillos, hermanos,
tíos, nietos, tribal manera de entender, 
que esta tienda de tierra nos queda chica,
porque crecemos saludablemente para atender a los próximos.


Para amar con nuestra vida a nuestro Dios, porque Él nos puso,
como diseñados perfectos los unos con los otros,
para realizar en acción nuestra oración de vida.
Eternamente Padre.


Para soltarte la eternidad en los lomos,
no para hoy,
para que vivas para siempre,
dentro del mañana generoso de hoy,
ayer,
como presente:


sencillamente,
con mi alegría de corazón,
con mi pequeñez enorme.
Con mi locura,
con mi adopción,
y sin un por qué humano.


Y verte, disfrutando de tu familia y amigos,
gigante y hermoso Golden,
dorado, brillante, real.
Siempre con tu chaleco,
siempre dispuesto a ir al agua,
porque vos sabés muy bien:


"nunca se sabe dónde salvaremos otra vida".



Para amar con nuestra vida a nuestro Dios, porque Él nos puso,
como diseñados perfectos los unos con los otros,
para realizar en acción nuestra oración de vida.
Eternamente Padre.


Tu nariz olfateando el peligroso camino de regreso,
el brindis de Jeremías, de Guillermo.
Tu nariz delicadeza,
la realidad de guerra de mañana,
de dentro de un ratito nomás.
De volver a clamar los arrebatos de nuestra historia como siempre prolongada,
recordándote.
Esa gente que te rodeaba hoy, y mucha tanto otra,
te elige.
No por lo que vos sos. Sino por lo quién amó y ama tu Alma.
Tu alma preciosa, entera y brillante.
Como tus ojos de hombre que sabe a dónde va.


Como tus ojos que son el balcón del hogar;
(donde Jesús, en persona, habita con los suyos.)


Multitud de días para mi amigo,
increíble y bello momento de parrilla,
y de ritmo popular con mi familia.


Reconciliado con el invisible.
Sumo y sigo.


Sumo y sigo.
Sacerdote. Honrándose cada día.-



Para amar con nuestra vida a nuestro Dios, porque Él nos puso,
como diseñados perfectos los unos con los otros,
para realizar en acción nuestra oración de vida.
Eternamente Padre.


No puedo dejar de pensar en la maravillosa Gracia
que reúne a los hombres en derredor del fuego,
y que saca a los hombres del fuego,
y los pone en los lugares de fuego.

Gracias.
Gracias.
Derrame de honra.

Para amar con nuestra vida a nuestro Dios, porque Él nos puso,
como diseñados perfectos los unos con los otros,
para realizar en acción nuestra oración de vida.
Eternamente Padre. 




















No hay comentarios: